Es una ciudad que vive frente al mar
y como el mar en su ahínco
te baña palmo a palmo
Calle a calle va contigo
como tú vas con ella
y cuando te alejas
siempre regresa a ti
Es una libertad de auroras
en tus mareas
sobre olas consentidas
Y cuando los hombres duermen
la miras
la respiras
la seduces
quieres sacarla de su jaula frente al mar
decirle que tu jaula
ahora son sus calles
Sabes que hay hombres que la han visto llorar
en una soledad de multitudes efímeras
Gemida sin palabras
ella se declina
es húmeda y ambarina
si la desnudas tiembla
si la caminas
te halla o te penetra